El uso profesional del masaje en el ámbito sanitario requiere una profunda comprensión de la anatomía y la fisiología humana, así mismo precisa del conocimiento de sus indicaciones y especialmente de las contraindicaciones, siendo este el tema de base durante la formación del fisioterapeuta.

A demás se le instruye en el arte y la técnica del masaje. Se forma en cuestiones relacionadas con la conducta ética, y en la capacidad de saber mediante la recogida de datos a través de la historia clínica y la exploración, cuando tiene que aplicarlo y cuando no. Se le capacita para que conociendo el terreno que tiene que tratar, evitando causar daño.